Mucho se ha analizado y otro tanto se ha especulado con el proceso decisorio de los Kirchner. Algunos ven al kirchneriso como un gobierno de derecha que "se vende por izquierda"; otros, como un gobierno populista e intervencionista que no cuadra en ningún extremo; los más devotos ven un plan trazado con detalles para desarrollar al país con equidad social.
Es innegable que pagarle al contado al FMI y al Club de París, acordar con los holdouts y mantener cueste lo que cueste el superávit necesario para pagar los intereses de la deuda y algo de amortizaciones (aun a costa de frenar obras) son medidas de un gobierno de derecha. Es innegable que derrochar subisidios sin una clara orientación redistributiva son medidas populistas, asi como suspender exportaciones es populista o estatizar empresas es de izquierda. ¿Hay un plan maestro más allá del tipo de cambio alto y la "reindustrialización"? Si está, no lo veo.
Hoy Maxi Montenegro cita en su columna a un funcionario que "conoce bien cómo se toman las decisiones económicas en la cúspide del poder". Dice así: “El Gobierno no sale ni por derecha ni por izquierda, sale a los ponchazos, por necesidad, por donde puede, como de costumbre". Martín Lousteau había dicho días atrás que hay decisiones trascendentes que se toman "en quince minutos".
Improvisación y pragmatismo. Esos, creo, son los maestros directores de esta obra histórica que se llama kirchnerismo
sábado, 27 de septiembre de 2008
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1 comentario:
Encontre tu blog pregunta en google qué es Trade off?. Me explicaste re bien y le agarre gusto a tu blog, felicidades desde méxico. Atte. Sebastián
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